EC / Toledo
Toledo sabe de solidaridad. Un año más el obispo auxiliar, Ángel Fernández Collado, daba por inaugurado esta mañana el rastrillo solidario de Manos Unidas en la sala de exposiciones del Palacio Arzobispal, en en número 1 de la calle Trinidad. La presidenta de esta organización de la Iglesia en la ciudad, Lucía Morales, ha explicado que la recaudación de este mercadillo se destinará a un proyecto de cooperación en una de las regiones más pobres de la India, en Delhi.
Consiste en la realización de nuevos programas de desarrollo comunitario en barrios marginales por un importe de 110.533 € siendo beneficiarios directos 2.580 personas e indirectos 15.100 personas. Con el proyecto, se pretende hacer frente a los problemas sociales con especial atención a las niñas, chicas jóvenes y a las mujeres.
Por su parte, el obispo auxiliar ha destacado la labor que realizan los voluntarios que hacen posible la organización de este rastrillo y del resto de actividades de la entidad.
Al acto también han asistido la alcaldesa, Milagros Tolón, así como la concejala de Familia, María Teresa Puig; el subdelegado del Gobierno, Fernando Sanz; el general y director del Museo del Ejército, Juan Valentín-Gamazo; el deán de la catedral, Juan Miguel Ferrer, y miembros del Grupo Municipal Popular.
Así, la regidora ha destacado la labor que realiza esta organización no sólo con la organización de este mercadillo solidario sino a lo largo de los 365 días del año y el apoyo que siempre tendrá del Ayuntamiento para cumplir sus objetivos.
Para el Ayuntamiento de Toledo, ha dicho, «es básico ayudar a las personas que más lo necesitan» y colaborar con las entidades que persiguen este objetivo. Tolón ha anunciado que la partida destinada a cooperación internacional se va a incrementar en los presupuestos del próximo ejercicio.