J. G. / Toledo
La historia del papel plegado es una tradición milenaria que el profesor Javier Caboblanco ha actualizado de manera sobresaliente con el fin de incentivar a los alumnos en el arte, que lo es, del estudio. La papiroflexia como herramienta de aprendizaje y vehículo para despertar la imaginación y desarrollar la creatividad de aquellos que forman la sociedad del futuro es el fin de este cuentacuentos que hace un año aterrizaba en la Biblioteca de Castilla-La Mancha con la exposición de 77 figuras de papel basadas en la saga Star Wars.
La sala Borbón-Lorenzana, donde se atesora la colección más antigua y rica en cuanto a valor patrimonial y artístico de la Biblioteca regional, abría sus puertas a las naves espaciales, a los robots y a los personajes de esta aventura cinematográfica de la que ya se han anunciado nuevas entregas hasta el años 2020.
Ahora sorprende con una nueva exposición, esta vez sobre el universo Pokémon. La muestra permanecerá abierta hasta el 7 de abril y tiene un amplio programa de actividades paralelas como el taller de papiroflexia para los más pequeños los próximos 9 y 23 de marzo.
La exposición cuenta con una guía didáctica para aquellos profesores que vean en la papiroflexia y en los Pokémon un recursos educativo más para asignaturas como las matemáticas o el inglés, pues este es uno de los objetivos de la muestra, además de atraer a los jóvenes a la Biblioteca con sus padres.
«Todo lo que van a ver en la exposición lo podrán hacer en casa, son figuras básicas a partir de tres piezas, es lo que llamo el método de las tres ‘C’», indica convencido de las ‘propiedades’ de la papiroflexia con la que como explica «puedes hacerte el juguete que te de la gana».
De esta forma, la animación a la lectura y el arte de doblar el papel con sentido regresan a la Biblioteca de Castilla-La Mancha. Una exposición que cuenta con material didáctico de apoyo y con un panel interactivo con los 100 Pokémon creados por Caboblanco y la explicación de cómo hacerlos en papel.
