J. Guayerbas / Toledo
Divertida y amena a la par que emocionante e intensa. La gala de clausura y entrega de premios del Festival del Cine y la Palabra, CiBRA, ha reunido este domingo en el auditorio del Palacio de Congresos ‘El Greco’ a parte importante de la industria audiovisual. Por la alfombra azul han pasado figuras como Gemma Mengual, Carlos Saura y una emocionada Ana Belén al recibir el Premio de Cine ‘Alice Guy’ de manos de la alcaldesa, Milagros Tolón, y del director José Luis Sánchez.
El CiBRA, dirigido por Gabriel Castaño con ocho ediciones, es uno de esos festivales que va a más gracias al apoyo y a la logística del voluntariado que se ha vuelto a volcar con el desarrollo de la gala que contó con el humor y la improvisación de Calambur Teatro y los números musicales de ‘La Bella y la Bestia’ en el 25 aniversario de su estreno gracias a Nueva Era Teatro. La nota musical, siempre en directo, fue cosa de ‘Los músicos de Josué’, y todo ello bajo la batuta y colaboración de la Escuela de Especialistas de Ángel Planas, la Asociación Cultural Festival Celestina, La Recua Teatro y María Elena Diardes, directora y artífice de la gala.
Un joven maestro de ceremonias que huye de nombres artísticos rocambolescos, Álvaro Rico, natural de La Puebla de Montalbán -una de las dos sedes del certamen- llevó el ritmo de un espectáculo cargado de sorpresas, como la que recibió Ana Belén nada más subir al escenario cuando un coro infantil interpretó para ella ‘La Muralla’. La actriz que en 2017 recibirá el Goya de Honor de la Academia del Cine español no dudó en cantar el tema con la ovación unánime del auditorio, tras escuchar el mensaje en vídeo que le enviaba su amigo y compañero de escenarios, Víctor Manuel.
Josefina Molina y Pilar Miró, las primeras cineastas
«De no ser por el Festival CiBRA hoy no sabría quien fue Alice Guy». Ana Belén iniciaba así un discurso de agradecimientos, de hecho, el premio se lo dedicó a sus padres, y en especial a su madre. «Siempre he visto a mi madre trabajar, cuando yo decidí dedicarme en serio a esta profesión ella intuyó que lo mejor que podía hacer era no ponerme barreras, dejarme, porque quizá mi madre intuía que dedicándome a esta profesión yo iba a ser más libre, iba a crecer como persona, iba a convertirme en un ser humano medianamente aceptable», apuntaba la premiada.
Además, la actriz recordó a las primeras directoras de cine de España, a Josefina Molina y a Pilar Miró, pioneras en una profesión hasta el momento reservada a los hombres. Con ellas, dijo, la dirección cinematográfica «tomó forma y a partir de ahí muchísimas más mujeres, no sólo directoras, se han hecho imprescindibles en los rodajes cinematográficos», a lo que añadió, «lo que hemos ido haciendo es poner los pies en las huellas de otras mujeres de diferentes ámbitos, huellas que apenas eran perceptibles pero que ahí estaban. Gracias al Festival CiBRA por hacer que las mujeres tengan visibilidad».
Por último, Ana Belén recordó unos versos de Blas de Otero en homenaje a todos los que hacen posible el CiBRA, el festival que como indicó aúna el cine y la palabra, y es que ‘Si he perdido la vida, el tiempo, todo lo que tiré, como un anillo, al agua, si he perdido la voz en la maleza, me queda la palabra’.
Lágrimas y un sí rotundo a la Cultura
Era la primera gala a la que asistía acompañada de sus hijos. Gemma Mengual se emocionó y mostró su lado más humano, «¡qué emoción!» fueron sus primeras palabras. La olímpica y nadadora de sincronizada confesó ser amante de la literatura y del cine. «Siempre me he guiado por la pasión, me siento viva cuando nado y hoy tengo la suerte de estar aquí con mis hijos y con mi futuro marido. Seguiré aportando al deporte todo lo que pueda», dijo emocionada.
Por su parte, el director de cine Carlos Saura a sus 84 años se mostró sorprendido y con tono sarcástico afirmó que jamás había visto un ‘cine’ «así de repleto». Y es que las 925 butacas del auditorio El Greco estaban ocupadas. «La verdad que ya no me acuerdo de ellas, de todas las películas que he dirigido, las voy dejando atrás, forman parte de mi pasado, de mi presente y de mi futuro con los proyectos que tengo en la cabeza», dijo, no sin agradecer al CiBRA la organización de una velada como esta. «Es un festival lleno de intenciones y de libertades, creo que la cultura en nuestro país se hace a base de francotiradores, que las autoridades den más dinero para que sea aún mejor», apostilló con el gran aplauso del público.
Los premiados
El premio ‘Adaptación a una vida, una vida de cine’ fue para Teresa Perales, mientras que el premio ‘Carlos Blanco’ al mejor guion fue para el tándem Rodrigo Sorogoyen e Isabel Peña por ‘Que Dios nos perdone’. Ambos se mostraron agradecidos al festival por este reconocimiento al mejor guion del año.
La mejor interpretación masculina llegó por partida doble. El actor toledano Fede Aguado, que asistió a la gala con la actriz Noemí Ruiz, entregó la lámpara a modo de estatuilla a Vladimir Cruz que lo recogió en nombre de Jorge Perugorría, ambos de Cuba. «Permítanme lanzar un voto al futuro de Cuba», dijo el actor en un fin de semana crucial para la isla tras el fallecimiento, este viernes, de Fidel Castro. El otro premiado fue Roberto Álamo por su interpretación en ‘Que Dios nos perdone’. Dedicó el premio al director de este largometraje, Rodrigo Sorogoyen. El viceconsejero de Cultura, Jesús Carrascosa, y la directora general de Turismo, Ana Isabel Fernández Samper, entregaron el galardón.
Emma Suárez, premiada, no pudo asistir a la gala ya que se encuentra de rodaje en Méjico, pero remitió un mensaje dando las gracias al CiBRA y a Toledo «ciudad excelente». El premio especial del público fue para ‘Julieta’ de Pedro Almodóvar y protagonizada por Emma Suárez y Adriana Ugarte. Diego Pajuelo Almodóvar recogió el premio y excusó a su tio, Pedro, que en estos momentos se encuentra en Nueva York de promoción de ‘Julieta’. «Me ha enviado este mensaje», indicaba, «estoy contento, quiero agradeceros este premio, pues es el primero que recibe ‘Julieta’, y las primeras veces jamás se olvidan».
Por último, el premio especial del jurado lo recibió Nely Reguera por la dirección de ‘María (y los demás)’. Lo recogió junto a las actrices Alex Piñeiro y Rocío León. La gala finalizaba con el premio a mejor película para ‘El hombre de las mil caras’ de Alberto Rodríguez, director, entre otras, de ‘La isla mínima’. Ponente del CiBRA en otras ediciones, el director sevillano envió un mensaje de agradecimiento en vídeo.