J. Guayerbas / Toledo
Es una de las telas más espectaculares de la colección que el Cabildo de la Catedral Primada conserva en el Museo de Tapices de la Bajada del Barco. Se adquirió, probablemente, junto a otros dos procedentes de la almoneda de los bienes del Marqués de Priego, Pedro Fernández de Córdoba, fallecido en 1517. El tapiz de los Astrolabios, que hasta hace unos años se exponía en el Museo de Santa Cruz, se encuentra desde hace unas semanas en Bruselas.
La gran tela participa hasta enero en la exposición conmemorativa que la ciudad de Lovaina ha organizado con motivo del V Centenario de la publicación de ‘Utopía’ del humanista y teólogo Tomás Moro. La exposición ‘Utopía & More’ ocupa así las salas de la Biblioteca Universitaria de la ciudad flamenca.
El tapiz es una de las joyas invitadas a la exposición que aborda el arte y el humanismo del siglo XVI en Lovaina, localidad en la que en 1516 se publicaba el texto del también pensador y político inglés, Tomás Moro.
Aunque se desconoce el nombre de los talleres en los que se tejió el tapiz de los Astrolabios, lo cierto es que diferentes investigadores lo sitúan en la producción franco-flamenca de Tournai, en Bruselas.
El Astrolabios de la Catedral Primada, restaurado hace unos años en Madrid por Pepa Garrido y su equipo, es un tapiz de simbología complicada cuya interpretación es posible, en parte, gracias a las leyendas que su autor incluyó en las tres cartelas superiores.
Los autores que lo han estudiado opinan que este paño de ocho metros de largo por cuatro de ancho constituye una mezcla de teología, mitología y humanismo, y una simbiosis de las ideas profanas y religiosas, además de simbolizar la lucha del libre albedrío del hombre frente al destino.
De la descripción detallada que Juan Pedro Sánchez Gamero y Susana Cortés realizan de este tapiz en la publicación ‘Los textiles de la Catedral de Toledo’ destacan tanto la indumentaria de los personajes, muy suntuosa sobre todo en los terciopelos, lisos y decorados, brocados o moarés, como la no cenefa a modo de marco que suele darse en este tipo de obras.
Esta joya de la tapicería decorativa y artística se expone de manera habitual en la colección permanente del Museo de Tapices de la Catedral Primada, inaugurado hace un par de años en el antiguo Colegio de Infantes, en pleno Casco Histórico.